Como cada año el 6 de abril, coincidiendo con la promulgación del vigente Estatuto de Autonomía de Galicia, se hizo entrega de la Medalla del Parlamento de Galicia que este 2019 concede a la emigración gallega, a todas aquellas personas que tuvieron que dejar su tierra en busca de oportunidades. La Mesa del Parlamento de Galicia otorga este reconocimiento por su servicio a Galicia, por promulgar la cultura y costumbres gallegas allá donde fueran, con amor, orgullo y morriña. Esta IV edición, el Salón de los Reyes acogía para esta distinción a las entidades que integran la Comisión Delegada del Consello de Comunidades Gallegas, de la que el Lar Gallego de Sevilla forma parte.
Presidieron el acto el Presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices Vieira y el Presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo y . El Presidente del Parlamento de Galicia hizo un recorrido por la historia de la emigración gallega destacando las dificultades de comunicación que existían y valorando el esfuerzo de estos gallegos por mantener el vínculo con su tierra, sus raíces. Santalices resaltó que esta Medalla agradecía “la deuda impagable que Galicia tiene con la emigración” y puso en valor “el trabajo titánico que estas personas hicieron por mantener viva la memoria de su tierra”.
Tras las palabras del Presidente del Parlamento Gallego recibieron las medallas concedidas a los 14 centros o entidades que integran la Comisión Delegada del Consello de Comunidades Gallegas comenzando por las comunidades gallegas asentadas en las comunidades autónomas de España:
- Eduardo Méndez Gómez, por la Unión de Asociaciones Gallegas en Cataluña.
- José Ignacio Paz Bouza, por los Centros Gallegos de Salamanca.
- María Pilar Rodríguez Villar, por la Agrupación Hijos de Galicia en Sestao.
- Alfredo Otero García, por Lar Gallego de Sevilla.
A continuación se entregó la Medalla a las comunidades gallegas asentadas fuera de España en países de Europa, África y Asia; a las comunidades gallegas asentadas en países de América y Oceanía y finalmente a las asentadas en Montevideo, Uruguay.
Para Alfredo Otero García, Presidente del Lar Gallego de Sevilla, recoger este reconocimiento en representación de la emigración gallega, como delegados de la comisión es algo que ha vivido “con mucho orgullo” y afirma que “para mí recoger esta medalla es a lo máximo que puede aspirar una persona que tuvo que salir de su tierra”. Alfredo Otero reconoce emocionado que para él “poder representar a todos mis compatriotas en el Parlamento Gallego es algo de lo que me siento muy orgulloso y llevaré siempre en mi memoria y mi corazón”.
Para cerrar el acto el Presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo dio unas emotivas palabras felicitando a todos los galardonados en representación de todos los gallegos y descendientes que se encuentran fuera de Galicia. Núñez Feijoo destacó que antes de que se constituyera el Parlamento Gallego como cámara representativa ya “hubo parlamentos gallegos allá donde vivía una comunidad gallega emigrante, llamándose centro, unión, asociación, lar, sociedad, casa o hermandad pero ciertamente son parlamentos porque lo esencial del parlamentarismo es el diálogo o intercambio de ideas para la creación incesante de sentido comunitario”.